Para los hinchas de Universitario la figura de Teodoro “Lolo” Fernández se alza como la imagen que surgió de la nada y con esfuerzo, sacrificio, dedicación y mucha garra logró los más altos palmarés que todo deportista pudiera soñar: no solo el cariño multitudinario de la gente, sino el reconocimiento de un país entero.

“Lolo” cumple hoy 106 años desde aquel 20 de mayo de 1913 cuando vino al mundo en la Hacienda de Hualcará de San Vicente de Cañete, como el sexto hijo de la pareja de Tomás Fernández y Raymunda Meizán, y que tuvo una infancia modesta donde ya comenzaba a mostrar ese talento que lo catapultaría a los mitos más grandes del deporte nacional.


El joven Teodoro migraría desde su Hualcará natal hacia la capital, Lima, cuando tenía 16 años (1930) para estudiar y estar en compañía de su hermano mayor, Arturo, quien ya destacaba en el medio local por ser un talentoso futbolista que por entonces jugaba en el Ciclista Lima. Poco tiempo después el mayor de los Fernández Meizán ficharía por la joven Federación Universitaria (luego rebautizada como el Club Universitario de Deportes), quien a su vez llevaría al aún adolescente “Lolo” para ser probado; su juego sorprendió y se quedó en la U iniciando su carrera en la reserva estudiantil, torneo en el cual los cremas saldrían campeones y teniendo al cañetano como goleador.
Esto le valió ser promovido al primer equipo, teniendo su debut oficial en la Primera División un 29 de noviembre de 1931 ante Deportes Magallanes de Chile, su actuación fue determinante porque en esa ocasión marcó el gol del triunfo. A partir de entonces se forjaría la leyenda, el mito y la historia de “Lolo” que nunca dejaría de estar ligada a la de Universitario.

A lo largo de su vida como futbolista, “Lolo” consiguió muchos galardones y campeonatos, siempre con Universitario, porque este equipo que lo vio nacer se convirtió en su forma de vida. En ese sentido, desde 1930 hasta su retiro en 1953, Fernández Meyzán fue goleador en 7 ocasiones: 1932 (11 goles), 1933 (9 goles), 1934 (10 goles), 1939 (15 goles), 1940 (15 goles), 1942 (11 goles) y 1945 (16 goles); asimismo, obtuvo 7 campeonatos nacionales con la U (1929, 1934, 1939, 1941, 1945, 1946, 1949); jugando un total de 180 encuentros, 156 goles, participando en 48 clásicos ante Alianza Lima, anotando 29 tantos.